viernes, 25 de enero de 2013

Libros, libritos, libracos y cine: The Bat, de Mary Roberts Rinehart y Avery Hopwood


Mary R. Rinehart ha sido considerada unanimemente como la gran rival de Agatha Christie en el género de los whodunit. Dotadas de una inteligencia tremenda y capaces de mantener en vilo a cualquiera con obras no tan solo abundantes sino de calidad, fueron sin duda dos de los principales pilares de la literatura popular del S.XX... Bueno, fue: lo fue Christie, pues Rinehart ha sido relegada al semiolvido.


Mary Roberts Rinehart (1876-1958)
Mary Roberts Rinehart nació en Pittsburgh (anda, como una profe mía de cuando iba a la Uni) en 1876, y de hecho publicó su primera novela 14 años antes que Agatha Christie.

A Rinehart se le deben esencialmente 3 cosas: la aplicación del recurso del "si [yo] lo hubiera sabido" - donde el narrador, que es un personaje de la obra, se va culpando de algo que ha hecho, que no se revela hasta el momento oportuno para sorprender al lector - a la narrativa de misterio (Agatha Christie fue precisamente la gran maestra en el uso de este recurso) . También fue la creadora del latiguillo "el culpable es el mayordomo" y de las primeras historias de genuino misterio e intriga con un supervillano harto peculiar, más en la línea de un Fu-Manchú que de un Moriarty, en un Whodunit al uso. Aquí debemos empezar a concretar.


Avery Hopwood  (1882-1928)
En 1919 decidió adaptar al teatro una de sus obras: La escalera de caracol (The Circular Staircase, 1915) y aunó fuerzas con el dramaturgo Avery Hopwood. En lugar de adaptar la obra directamente y creo que influenciada por los seriales de cine de la época, como los de Fantomas, Rinehart decidió crear un villano larger than life en lugar de tirar por un asesino al uso, ideando a un enmascarado llamado simplemente The Bat, caracterizado por ser listo, hábil y despiadado. También etiene un macabro sentido del humor: usa recursos como dejar cartas en forma de murciélago allí donde ha actuado, o dejar un pobre murciélago de verdad clavado en las paredes de los domicilios de sus víctimas.
La obra se estrenó en 1920 y gozó de gran popularidad, hasta el punto de que Hopwood la noveló para su venta. Es una novela que se deja leer fácilmente, es relativamente corta, tiene muchísimo humor, toques de terror y, ante todo, una protagonista que se avanza bastantes años a otras del mismo tipo (Miss Marple, Jessica Fletcher)  y un villano fuera de lo común. (Está en dominio público. La podéis bajar -en inglés - del Project Gutemberg)

Edición con mapa de la casa de los horrores incluído

El éxito en broadway fue tan brutal que se decidió adaptar la película al cine: sería una producción auspiciada por United Artists. En 1926 el director Roland Young realizó su adaptación de la obra junto al hombre que hizo que ésta fuera estéticamente memorable: el entonces diseñador de producción William Cameron Menzies, que le dio una moderna estética a la película, que se aplicaría con aún mayor éxito en el remake sonoro que el mismo Young realizó (aunque por entonces W. Cameron Menzies se dedicaba a otros menesteres). Otro remake (¡Y nos quejamos de los de ahora!) se realizó en 1959, protagonizado por vincent Price... Pero dejémonos de preámbulos y dediquémonos a las películas una a una:

Versión de 1926:

Esta versión muda tiene un aspecto técnico cuidadísimo, en el que destaca el diseño de producción del futuro director William Cameron Menzies (con un hábil uso de maquetas y un ligero toque expresionista) se consideró una de las grandes películas del subgénero ¨casas encantadas¨, entonces muy en boga. No faltan los toques de comedia - a cargo de la cómica Louise Fazenda, del equipo de Mack Sennett y del secundario Jack Pickford, hermano de Mary - que suelen adornar este tipo de filmes, aunque debe apuntarse que en algunos momentos se pasan con el slapstick.


Con su acción a medio camino entre el teatro y el cómic, resulta toda una curiosidad verla. Tiene inventiva y aunque empieza un tanto lentilla, va enganchando.

Mucha gente dice que la versión de 1930 inspiró a Bob Kane para crear a Batman, entre ellos el mismo Kane. Sin embargo, me inclino por pensar que cogió elementos de las dos. Por ejemplo, mirad esta señal que deja el Murciélago en la versión 1926:


Nananananananananana... ¡BATMAAAAAN!

Este antepasado de la Bat-Señal no aparece en la película de 1930. También aparece la tarjeta de visita del ladrón, que se parece mucho a los Batarangs.

Aquí os la dejo, por si la queréis ver: es de dominio público.





Versión de 1930: 


Versión sonora y visualmente impresionante de la película de 1926, que equilibra mejor el terror, el misterio y el humor alocado, si bien alguna que otra interpretación logra ser cómica involuntariamente (Gustav von Seyffertitz, gran actor de pelis mudas con Von Stronheim cuyo acento es tan exagerado que le viene a uno la risa floja). También es más fiel - al menos en lo que respecta a la versión novelada - al material original, en nombres y acciones, si bien no en personajes.

Dirigida de nuevo por West y dotada de un ritmo narrativo tremendamente rápido (a ratos quizás demasiado) y de unos FX y una fotografía realmente impresionates (se nota mucha influencia alemana en este aspecto), tiene un notable pero desigual reparto, combinando a gente que empezaba en el sonoro y no era aún muy hábil en el medio (ver más arriba), con grandes promesas como Chester Morris, Una Merkel (que con el tiempo llegarían a ser nominados a sendos Oscars) o William Bakewell.

Personalmente me ha gustado más que la de 1926: tiene más ritmo, tiene una mayor compensación en la mezcla de géneros y es, si cabe, aún más atractiva a la vista que su antecesora. Es la versión que recomiendo a nivel personal.


Si la primera versión nos encontramos con los antepasados de lo que fueron los gadgets de Batman (no es revelaré cómo es el murciélago por si os da por verla, en esta versión tenemos los elementos estéticos que definieron al personaje, como los guantes con pinchos y la capa.


Versión de 1959: 



Esta vez, la peli va a cargo de un estudio modesto: la Allied Artists. Se distancia de la obra original para ofrecernos un producto más serio donde destaca el duelo interpretativo entre dos intérpretes como la copa de un pino y con unas voces de postín: Agnes Moorhead (la medio entrañable medio estrangulable madre de Samantha en la serie Embrujada) y Vincent Price.

Sin embargo, este duelo es de lo poco salvable de esta más bien floja versión. Despojada del humor alocado de las anteriores entregas pero con un argumento más intrigante dado que es un versión muy libre del material original y no sabemos por donde irá (vista la peli, no es nada de especial, que quede clarinete), es una película que no ofrece nada al espectador que no haya visto antes, ni a nivel artístico ni técnico. Las actuaciones del ignoto elenco secundario son pasables y las virguerías de escenografía, fotografía y FX de las versiones anteriores simplemente son inexistentes. Solo en el personaje del Murciélago, presentado esta vez más como un sádico psicópata ladrón que disfruta más matando que robando en lugar de un ladrón chiflado que no duda en matar (intento con esto establecer un ligero matiz. No sé si me habrá salido bien) y en un tramo final narrado en media res - si bien con un clímax demasiado precipitado - notamos una cierta mejoría y voluntad de hacer algo un poco novedoso (de hecho, no lo es). Lo que sí es novedoso y encomiable es el papel de las actrices. Las mujeres son las que llevan la voz cantante aquí; para la época es una peli muy feminista. Ello le hace ganar puntos extras. Incluso los tíos nos cansamos a veces del modelo de héroe sano sanote puro machote a quienes nos querríamos parecer.


Agradable banda sonora jazzística, variedad de localizaciones (cosa de la que que carecían las anteriores pelis) y un buen aprovechamiento de los escasos recursos en una peli mediocre que no pasará a la posteridad ni con los geniales Moorhead (protagonista indiscutible de la película, que quede claro) y Price de por medio. No es como para suspenderla. Es pasable, pero no la recomiendo: la veo más como un intento por parte de Allied Artists de repetir del éxito de ¨House of Haunted Hill¨ usando esta vez una base literararia que otra cosa. Si queréis disfrutar de ¨The Bat¨ quedaros con la versión de 1930 a menos de que seáis fans completistas de Vincent Price.


Como que también está en dominio público, os la dejo. Es muy distinta a la primera versión.




Espero que el artículo haya sido de interés, que hasta os he colgao la novela y dos pelis. Como para ir a reclamaciones, tu.

5 comentarios:

  1. Ale, ya está bajado el libro. Aunque mi cola de lectura es larga...

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  2. Este artículo va para candidato del peor que he escrito. Dios que desastre con la tipografía.

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  3. Wow, muy interesante, tengo que leerme los libros, no soy muy dado a leer, pero me ha llamado la atención.

    Pd: Cuando tenga tiempo le hecho un ojo al resto XD

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